Buen ejemplo son los anillos, colgantes y pendientes de firmas como la británica Alighieri, que inpirándose en la Divina comedia de Dante ha logrado sentar precedente poniendo de moda las joyas de apariencia manual (no en vano están hechas a mano, claro) e irregular. Aunque desde tiempos inmemoriales se han creado piezas decorativas con alergia al acabo pulcro y perfecto, lo que para muchas madres sería una joya ‘mal hecha’ se convierte ahora en una forma de diferenciarse de la joyería más clásica creando una identidad reconocible y sentando precedente.Hay quien piensa que los tocados y pamelas sufren de estacionalidad, es decir, que no son aptos para las cuatro estaciones del año, como sucede con algunos alimentos.
En verano, quizá por las altas temperaturas o por las tendencias que abogan por lucir peinado, se reduce considerablemente el número de invitadas con este tipo de accesorios. Sin embargo, en las temporadas de otoño e invierno, estas piezas regresan a los looks de boda con todo el protagonismo que merecen. Cada año triunfan unas corrientes estéticas y unos diseños, mientras que otros se dejan apartados en el cajón, pero todo parece indicar que en 2020 hay espacio para todas las propuestas, desde las más tradicionales a las más vanguardistas. Descubrimos las creaciones con más éxito de la rentrée.